¿Es realmente necesario un seguro para coche histórico?
En caso de contar con un vehículo histórico, tienes que contar con un seguro que cubra todas las posibilidades asociadas a este tipo de automóviles. En este post vamos a tratar sobre el seguro para coche histórico, que tiene ciertos rasgos que le distingue de las pólizas de vehículos convencionales.
Razones para contratar seguro coche histórico
Mucha gente considera que una moto o coche histórico no necesita asegurarse, ya que se va a mover poco y, por tanto, es prescindible contratar una póliza. No obstante, es necesario atender a algunos aspectos por los que se hace necesaria la contratación de un seguro coche histórico:
- Riesgo de robo: si hay gente de tu entorno que sabe de la posesión de un vehículo histórico, es posible que se corra tanto la voz que llegue a oídos de malhechores. Por ello, a pesar de contar con los mejores sistemas de seguridad, ninguno es 100% efectivo, por lo que solo una póliza podría cubrir el valor de esta máquina.
- Posibles eventualidades: independientemente del uso que le vayas a dar al coche histórico, este puede estar expuesto a diferentes tipos de riesgos con los que no se suele contar, tales como la humedad, el exceso de calor o un posible incendio que afecte al garaje.
- Valor económico: una tasación certera del estado del vehículo supone una razón por la cual es imprescindible contratar una póliza con todas las coberturas posibles para salvaguardar sus prestaciones.
- Circulacion: esta es la razón más obvia para recurrir a un seguro para coche histórico, ya que muchos de estos son aptos para conducir, por lo que la legislación exige contar con esa póliza.
Requisitos para seguro vehículo histórico
Existen algunos requisitos específicos para asegurar un coche histórico, motivo por el cual hay incluso compañías especializadas en seguro vehículo histórico.
Algunas de las pautas que deben reunir los propietarios de estos automóviles son:
- El turismo, monovolumen, todoterreno o motocicleta tenga una antigüedad superior a 20 años.
- Recorrer menos de 5.000 kilómetros al año.
- Una declaración firmada de que no se emplea el vehículo a diario o que se tiene otro para un uso habitual.
- Que el propietario tenga más de 25 años.
- Que el conductor tenga más de 25 años y un mínimo de antigüedad del permiso, que oscila entre uno y cinco años.
- Guardarlo en garaje.
Siempre se recomienda la contratación de un seguro lo más completo posible, ya que, en caso de daños, las reparaciones de coches tan antiguos y con piezas tan exclusivas pueden llegar a ser realmente costosas.
Antes de asegurarlo, la matriculación del vehículo histórico es fundamental para llevar toda la documentación en regla de este tipo de automóviles, para lo cual siempre es recomendable ponerte en manos de una gestoría administrativa que se encargue de todos los trámites y evitar al conductor este tedioso proceso.