Nuevo Reglamento de Vehículos Históricos: Un análisis de sus principales cambios y novedades
El nuevo Reglamento de Vehículos Históricos introduce una serie de modificaciones significativas en el proceso de clasificación, inspección y regulación de los vehículos históricos. En este post analizamos los puntos clave del reglamento, centrándonos en las responsabilidades atribuidas a las diferentes entidades, los procedimientos para la obtención del distintivo de vehículo histórico y las novedades que impactarán tanto a propietarios de vehículos históricos, como a museos y coleccionistas.
Diferenciación entre entidades relacionadas y servicios técnicos de vehículos históricos
Uno de los aspectos más importantes del nuevo reglamento es la clara diferenciación entre las Entidades Relacionadas con Vehículos Históricos y los Servicios Técnicos de Vehículos Históricos. Las primeras son organizaciones que tienen como principal objetivo preservar el patrimonio automovilístico, y tienen la capacidad de emitir certificados relacionados con la originalidad de los vehículos, especialmente en el contexto de las reformas. Sin embargo, estos certificados no tienen implicaciones técnicas o de seguridad vial.
Por otro lado, los Servicios Técnicos de Vehículos Históricos asumen un rol más amplio y técnico. Además de poder emitir los mismos certificados que las entidades relacionadas, su intervención es obligatoria en la clasificación de ciertos vehículos (como los del grupo B), especialmente en aquellos casos donde se debe garantizar que las reformas realizadas no comprometen la seguridad o la originalidad del vehículo.
Estos servicios técnicos también son responsables de emitir informes detallados que sirven como base para la posterior inspección técnica en una estación de ITV.
Disposiciones transitorias: Adaptación de laboratorios y vehículos ya matriculados
El nuevo reglamento también introduce una serie de disposiciones transitorias que son esenciales para garantizar una transición adecuada hacia el nuevo marco normativo. La primera disposición se refiere a los procedimientos que se iniciaron antes de la entrada en vigor del reglamento. En estos casos, los propietarios pueden decidir si quieren continuar con la normativa anterior o adaptarse a las nuevas reglas.
La segunda disposición otorga un plazo de un año a los laboratorios oficiales para adaptarse a las nuevas normativas, durante el cual podrán seguir operando como hasta ahora, aunque con ciertas limitaciones territoriales en la validez de sus certificados. Una vez acreditados por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC), sus informes tendrán validez en todo el territorio nacional.
La tercera disposición aclara que los vehículos matriculados como históricos bajo el reglamento anterior podrán seguir circulando con su permiso de circulación y el distintivo «VH» vigente, sin necesidad de adaptarse a la nueva normativa, a menos que el propietario lo desee.
Permisos temporales para vehículos de museos y colecciones
El nuevo reglamento introduce una novedad interesante con la creación de permisos temporales para vehículos pertenecientes a museos y colecciones museográficas. Estos permisos, válidos por un año, permitirán a los propietarios mover los vehículos por el territorio nacional para su mantenimiento, exhibición en eventos o en situaciones justificadas.
Los vehículos deberán portar placas rojas y estarán limitados para ser conducidos únicamente por el titular del permiso. Este nuevo permiso busca proteger y promover el patrimonio automovilístico al permitir una mayor movilidad de los vehículos históricos.
Nuevas normativas sobre inspecciones técnicas y exenciones
El reglamento también establece cambios en la frecuencia de inspección técnica para diferentes tipos de vehículos históricos. Las motocicletas deberán someterse a inspección cada cuatro años, con la excepción de aquellas que superen los 60 años de antigüedad, que quedarán exentas. Los ciclomotores, por su parte, están completamente exentos de la inspección periódica.
En cuanto a los vehículos de más de 30 años, el reglamento distingue entre diferentes grupos de antigüedad. Por ejemplo, los vehículos de entre 30 y 40 años deberán pasar la ITV cada dos años, mientras que los que superen los 45 años tendrán un intervalo de cuatro años entre inspecciones.
Un aspecto curioso que introduce el nuevo reglamento es que los vehículos históricos están exentos de llevar la pegatina de la ITV.
Reformas permitidas y sustitución de piezas
El capítulo III del reglamento se centra en la regulación de las reformas y la sustitución de piezas en los vehículos históricos. Una de las principales preocupaciones es la preservación de la originalidad del vehículo, no se permiten reformas que alteren significativamente la estética o la estructura original del vehículo, aunque sí se admiten operaciones de mantenimiento rutinario o la sustitución de piezas por otras similares.
El reglamento establece una excepción interesante para las reformas realizadas dentro del periodo de producción del vehículo, o hasta quince años después de que finalice dicho periodo. Estas reformas podrán ser aceptadas, siempre y cuando sean habituales para ese modelo de vehículo.
Otra novedad es la posibilidad de que los propietarios de motocicletas históricas puedan instalar y circular con un sidecar, siempre y cuando este cumpla con los requisitos de seguridad y cuente con un certificado de conformidad emitido por un Servicio Técnico de Vehículos Históricos, además de pasar la correspondiente ITV y obtener la autorización de la DGT.
Vehículos dados de baja y clasificación de históricos
Una de las cuestiones más destacadas del capítulo IV es la posibilidad de matricular como histórico a vehículos que anteriormente habían sido dados de baja. Es necesario que el vehículo conserve al menos su bastidor original con el número de chasis grabado de forma indeleble. Este aspecto es especialmente relevante para coleccionistas que deseen restaurar vehículos antiguos y devolverlos a la carretera como coches históricos.
El Nuevo Reglamento de Vehículos Históricos supone un avance significativo en la regulación y preservación de estos vehículos. Desde la diferenciación de responsabilidades entre entidades y servicios técnicos, hasta la creación de permisos temporales para museos y colecciones, el reglamento busca fomentar la conservación del patrimonio automovilístico de una manera más rigurosa y adaptada a las necesidades actuales.
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